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sábado, 9 de mayo de 2020

La santidad de Dios





La santidad de Dios








“No te acerques más —le dijo Dios—. Quítate las sandalias, porque estás pisando tierra santa”
Éxodo 3:5

I - La santidad de Dios

Dios se rebela “Santo”  pero, ¿Qué entendemos por santo:
El significado bíblico de Hebreo kadosh es separado, otro, lo opuesto a lo que es común, refleja a la pureza, la distinción, lo apartado, lo reservado a la consagración santísima. En las traducciones modernas la palabra Kadosh ha sido reemplazada por la palabra santo.
Adjetivo:Griego ἅγιος [hágios] santo, sagrado; consagrado, puro.
 Apartado de y apartado para y de alguna manera comprendemos cuando hablamos de santificar un objeto o persona, siendo esto mismo la separación de dicho objeto o persona para el servicio exclusivo a la deidad.

Pero… cuando asociamos santo a la deidad misma es donde surge el problema.
En caso la persona u objeto a santificar es finito dentro de nuestro ámbito de coexistencia podríamos llegar a entenderlo, pero al referirnos a la deidad como aplicar el concepto en nuestra finitud queremos apreciar la infinitud, dentro de lo natural entender lo sobrenatural y dentro de nuestro  concepto de existencia temporal no solo pretendemos entender lo eterno aun cuando la deidad es atemporal.

“¡Al único Dios, nuestro Salvador, que puede guardarlos para que no caigan, y establecerlos sin tacha y con gran alegría ante su gloriosa presencia, sea la gloria, la majestad, el dominio y la autoridad, por medio de Jesucristo nuestro Señor, antes de todos los siglos, ahora y para siempre! Amén”
Judas 1: 25






Al hablar  de la santidad en Dios  podemos proponer dos cosas:

1 – Dios es santo “aparte” al no depender su existencia y propósito del universo.

“¡Al único Dios, nuestro Salvador, que puede guardarlos para que no caigan, y establecerlos sin tacha y con gran alegría ante su gloriosa presencia, sea la gloria, la majestad, el dominio y la autoridad, por medio de Jesucristo nuestro Señor, antes de todos los siglos, ahora y para siempre! Amén”
Judas1:25

“El principio de el tiempo es la creación, Dios su creador
“Dios, en el principio, creó los cielos y la tierra.”
Génesis 1:1

La santidad de Dios no es comparable ni depende de el universo tal lo conocemos y entendemos.





2 – Un Dios Santo.

Sanidad como atributo:
La santidad de Dios es Su cualidad absoluta y fundamental. Su pureza absoluta, inmaculada, manifiesta Su gloria deslumbrante y eterna.

La Santidad de Dios como perfección.

Dios es santo en cada uno de sus atributos como la expresión de su perfección.

“El camino de Dios es perfecto; la palabra del SEÑOR es intachable. Escudo es Dios a los que en él se refugian”
2Samuel 22:31

“Él es la Roca, sus obras son perfectas, y todos sus caminos son justos. Dios es fiel; no practica la injusticia. Él es recto y justo”
Deuteronomio 32:4

“La ley del SEÑOR es perfecta: infunde nuevo aliento. El mandato del SEÑOR es digno de confianza: da sabiduría al sencillo"
Salmo 19:7

A Dios no le hacen falta atributos para ser más perfecto ni le sobran pues estos dos extremos contradicen la perfección.





II – Dios es Santo

“Exalten al SEÑOR nuestro Dios; adórenlo ante el estrado de sus pies: ¡él es santo!”
                                                                          Salmos 99:5 

Dios es santo no porque este apartado para… Dios es Santo porque es aparte de todo cuanto existe el es trascendente a todo lo creado, de modo para que el hombre pueda saber algo de Dios que es inalcanzable e inaccesible es porque Dios mismo lo permite.

Dios se rebela al hombre  porque quiere que el hombre lo conozca y el hombre lo va a conocer en la medida que Dios lo permita, pues el hombre aunque tuviera la accesibilidad completa al conocimiento de la deidad el hombre por su incapacidad de poder procesar dicho conocimiento pues un ser limitado no podrá entenderlo. Deuteronomio 7.6; Levíticos 11.44; Números 15.40.

Lo que se le permite que conozca para que lo pueda entender y aquí que el hombre no puede conocer todo en cuanto a Dios no porque Dios este limitado en cuanto a lo que revela de si mismo sino en la limitación del hombre de entender y comprender dicha revelación. (Entender es percibir el significado de algo, aunque no se comprenda. Comprender es hacer propio lo que se entiende y actuar congruentemente con ello)




III - El hombre ante la santidad de Dios.

“Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, La luna y las estrellas que tú formaste, Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, Y el hijo del hombre, para que lo visites? Le has hecho poco menor que los ángeles, Y lo coronaste de gloria y de honra. Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies”
                                                                               Salmos 8:3-6

Decimos que una cosa es mejor que otra al comparar las virtudes de una contra las deficiencias de la otra y juzgamos cual es la mejor.

Traslademos esta situación entre el hombre y la deidad, el hombre por mas apartado de Dios que se pueda encontrar a causa del pecado en si mismo tienen el concepto de lo bueno y lo malo refiriéndome al hombre como la humanidad, que hay personas o grupos que han cauterizado su conciencia al punto de aparente de no reconocer entre uno y otro; como  humanidad está amplia-mente aceptado la diferencia y promoviéndose lo bueno, lo correcto y legal.

Aun el hombre que en su limitado conocimiento de lo correcto e incorrecto y este tratando de hacer lo correcto no solo de moral sino existencial trascendente, comprendiéndose criatura y reconociendo al creador y en esa revelación se guarda… pero al ser expuesto al espejo de la perfección… sus imperfecciones que talves no creía que existieran salen a flote, ¿cuánto más si antes de ser expuesto ya  reconoce su condición.?

Que apabullante revelación de su pobreza, bajeza e imperfección,  - ¡Soy una criatura no soy el centro del universo ni su razón de ser!
 -
Todo lo creado se crea para algo al igual que un objeto de mano factura se crea para un propósito y uso. Y cuando no dan la talla para lo que fue fabricado se desecha por ineficiente e inútil.

La criatura se encuentra ante su hacedor, lo profano ante lo santo, la imperfección ante la perfección el juicio retumba en el corazón de la criatura y la sentencia como un reflejo… ¡culpable!
Hay un juez pero no para esgrimir las razones y la legalidad  “El hombre ante el Juez reconoce su condición” sino, Para impartir justicia.

Conclusión el hombre ante Dios no puede sentirse sino culpable y reo convicto y no me refiero a los que nosotros consideramos malos, sino, a toda la humanidad, pues nada de lo que es o haga  es superior a quien lo hizo.
Nosotros ¿podríamos pretender estar al mismo nivel de perfección que nuestro hacedor como para sentirnos seguros por nosotros mismos ante nuestro hacedor.?






IV -  El propósito de la salvación en relación con la Santidad de Dios

El propósito de Dios al perdonar es restablecer el orden moral con la criatura y así esta puede relacionarse con su hacedor.
En relación con el hombre es la manifestación del amor de Dios y a la vez el medio para acercarse a Dios.

Es una manifestación del amor de Dios pues la santidad del hombre no es propia sino de forma derivada una participación de la Santidad de Dios

“porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo”
                                                   1 Pedro 1:16 

A - La santidad de Dios como la revelación de la perfección del creador contrastando con la imperfección de la criatura y cuando el hombre reconoce dicha revelación, reconoce su condición y culpabilidad pero junto con esta revelación de la santidad de Dios también se le presenta el amor de Dios no quedándole más que santificarse.

“Entonces dije: !!Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
                                               Isaías 6:5


Las personas que dicen tener una relación con Dios pero, la santidad no es parte de su vida, se puede concluir que su relación con Dios no es genuina, pues el estar expuesto ante la presencia de Dios solo resulta en una forma positiva en santidad del individuo y negativa alejándose aun más.

“Ésta es la causa de la condenación: que la luz vino al mundo, pero la humanidad prefirió las tinieblas a la luz, porque sus hechos eran perversos.                            Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz, y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto.                                                                   En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios.”
Juan 3:20


Si practica adulterio, chismes, robo, mentiras, etc. no está en santidad por lo que es mentira que tenga relación con Dios, se engaña a sí mismo y se engañan los que así creen “Sed santos porque yo soy santo” La voluntad de Dios es que os apartéis de fornicación”

B - Como el hombre siendo imperfecto ¿puede alcanzar cumplir la justicia de Dios para no ser declarado culpable?

"Me explico: lo que se puede conocer acerca de Dios es evidente para ellos, pues él mismo se lo ha revelado.
Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a través de lo que él creó, de modo que nadie tiene excusa."
                          Romanos 1:19-20 

“Éstos muestran que llevan escrito en el corazón lo que la ley exige, como lo atestigua su conciencia, pues sus propios pensamientos algunas veces los acusan y otras veces los excusan”
                                              Romanos 2:15 

Dios se rebela así mismo como una expresión de amor y es por amor a su creación que facilita los medios a través de su misericordia que cumple los requisitos de la justicia en Cristo para que el hombre por medio de la gracia se le acrediten los méritos de Cristo, Dios paga la deuda del pecado del hombre en Cristo y el hombre es responsable ante Dios por aceptar o rechazar dicha provisión.

“Él es el sacrificio por el perdón de nuestros pecados, y no solo por los nuestros, sino por los de todo el mundo.”
                                              1 Juan 2:2 
               
El hombre es el único que puede limitar su propósito al aceptar o rechazarla y si decimos que el hombre es responsable es que tiene conocimiento de su responsabilidad.

La humanidad siempre implícitamente ha tenido el concepto del bien y del mal y la concepción de la deidad como principio y razón, si bien es cierto el hombre no puede cumplir con los estándares divinos, pero al reconocer a la deidad y “tratar” de agradarle dentro del marco de lo correcto siendo participe de la misericordia de Dios y ser beneficiados por medio de la gracia de Dios ¡Los méritos de Cristo! Se le abonan y así es redimido de su imperfección  accediendo al propósito eterno que es en amor la relación con su creador.

Conocer la santidad de Dios no es un éxtasis momentáneo, ¡es una experiencia vivencial!



Es en la persona del unigénito Hijo de Dios es que podemos conocer la santidad de Dios… 
Pero ¿está usted dispuesto?


“Vengan, pongamos las cosas en claro —dice el SEÑOR—. ¿Son sus pecados como escarlata? ¡Quedarán blancos como la nieve! ¿Son rojos como la púrpura? ¡Quedarán como la lana! ¿Están ustedes dispuestos a obedecer? ¡Comerán lo mejor de la tierra!”
                                 Isaías 1:18-19

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